- Las industrias con procesos dinámicos y sujetos a limitaciones de fechas y recursos, como proyectos de desarrollo o investigación, demandan una metodología que gestione y cuantifique mejor su incertidumbre.
- Una nueva tecnología en el cloud, como la de Sinnaps, incorpora lo mejor de estilos de gestión predictivos y ágiles en una misma herramienta.
Está a la orden del día. La gestión de proyectos cada vez está más orientada al uso de metodologías ágiles, sea cual sea su tipo de industria. Una condición que, en muchos casos, sólo se da si la flexibilidad viene apoyada por la predicción.
El método tradicional de gestión, tradicionalmente asociado a metodologías predictivas, resultaba demasiado rígido y nunca ha funcionado bien en muchas empresas. Si se sigue estrictamente la planificación inicial de principio a fin, tendremos más posibilidades de fracaso. Los proyectos están vivos, cambian a lo largo de su ejecución. Surgen imprevistos, se modifican plazos, el presupuesto varía y los requerimientos iniciales pocas veces se mantienen intactos. A todo esto hay que añadir que la revisión y comunicación continua entre los interesados, forma parte indispensable de la gestión inteligente y online de hoy día.
Con métodos tradicionales, no podemos cambiar nada en mitad de la fase de ejecución, ¿para qué revisarlo entonces? Las modificaciones se toleran peor en los métodos tradicionales y la evaluación de resultados sólo se hace en el cierre del proyecto, momento en el que poco podremos hacer sino es en el siguiente encargo.
Por este motivo, el colectivo de directores de proyectos de desarrollo software fue el primero en darse cuenta que trabajar con una metodología meramente predictiva, no servía. Se identificó que partes del proyecto no aportan valor, como era la planificación sobre demasiados supuestos o la funcionalidad interesante pero no verdaderamente necesaria. Se perdía tiempo y no se pasaba a la acción efectiva. De ahí, el nacimiento de técnicas ágiles.
Desde hace unos años, éstas metodologías flexibles han entrado con fuerza en el sector de la gestión de proyectos y se están asumiendo también en las demás industrias. Sin embargo, ha pasado suficiente tiempo para aprender de ellas, y cada vez parece más claro que al igual que en casi todo, lo mejor es combinar lo más interesante de ambos mundos: los métodos ágiles con los predictivos.
Lo mejor de la metodología tradicional o predictiva
- Se tienen en cuenta todos los aspectos del proyecto de una manera global
- Se puede estimar una fecha de finalización, a través del cálculo del camino crítico (CPM)
- Resulta posible identificar cuellos de botella (PERT y CPM)
- Las dependencias entre las actividades son las que definen un flujo realista de trabajo y una correcta asignación de recursos (PERT) - El proyecto se ajusta a una estimación de presupuesto
- Existe una visión global de los objetivos a conseguir en el cierre del proyecto y unas especificaciones concretas - Existe una predicción de recursos, y es posible predecir sobre asignaciones
- Se pueden estimar costes, recursos y resultados a medio y largo plazo
Lo mejor de la metodología ágil o adaptativa
- Hay una gestión continua del riesgo
- Existe una total flexibilidad en las modificaciones
- Se mantiene una comunicación constante con el cliente, y los demás interesados del proyecto
- Las especificaciones del producto final se adaptan a parámetros realistas en el contexto del proyecto
- Revisión y control continuo de los plazos y costes
- Se da una correcta gestión de la incertidumbre, que permite rapidez de respuesta ante situaciones inesperadas
- Se aprende de las lecciones aprendidas durante la ejecución del proyecto
Como vemos, las metodologías ágiles pueden adaptarse a las necesidades ‘desconocidas’ del cliente y poseen una forma muy potente y útil de gestionar la incertidumbre. Sin embargo, en algunos proyectos, es posible predecir su comportamiento con plazos superiores a los habitualmente tratados con metodologías ágiles. Además, en industrias como la construcción o diseño industrial, las pequeñas variaciones en el consumo de recursos pueden tener un impacto enorme en la toma de decisiones. Por este motivo, es necesario llevar a cabo una cierta estimación predictiva de ciertos escenarios para apoyar esa toma de decisiones.
Con el fin de responder a estas necesidades, en Sinnaps hemos desarrollado una tecnología innovadora en la gestión de proyectos que nos ayuda a extraer las ventajas de ambas prácticas. Hace tiempo que muchas herramientas utilizan las técnicas predictivas basadas en PERT y CPM. También existen muchas herramientas más modernas que utilizan metodologías como Kanban o Scrum, pero tanto unas como otras suelen resultar insuficientes en proyectos profesionales, donde tanto la incertidumbre y los recursos juegan un papel primordial en la toma de decisiones.
En ámbitos de ingeniería, desarrollo, diseño o investigación entre otros, ya es posible realizar modificaciones importantes durante el desarrollo del proyecto y simular escenarios para que de forma predictiva, podemos medir el impacto de cada posible decisión. Esta forma de trabajar calcula automáticamente y de manera continua, el flujo de trabajo óptimo en base a cada cambio. Podemos observar como cada cambio afecta en la duración de su proyecto o su presupuesto, antes de decidir e implementar nada. Todo ello, manteniendo una comunicación fluida con sus clientes, sin encontrarse sorpresas de última hora.
De modo que, ¿por qué decantarnos por un solo método cuando podemos extraer lo mejor de ambos? Así funcionarán las industrias en un futuro no tan lejano, utilizando las funcionalidades de cada técnica que mejor se ajuste específicamente a su tipo de producto o servicio. Y es que en esto consiste en gran parte la transformación digital de las empresas, en combinar diferentes conocimientos y adaptarlos a nuestras necesidades para conseguir mejorar nuestras organizaciones.
Richard Balet, fundador y CEO de Sinnaps
Sobre Sinnaps
Sinnaps es un gestor de proyectos inteligente, capaz de planificar tus proyectos de forma automática según sus necesidades. Su tecnología exclusiva, utiliza un potente motor de renderizado basado en algoritmos de lógica PERT (Project Evaluation and Review Techniques) y CPM (Critical Path Method) para ayudarte a optimizar la gestión de tus proyectos así como para asesorarte en la toma de decisiones. Por eso Sinnaps es un gestor de proyectos inteligente capaz de ofrecer una amplia gama de herramientas únicas para asesorarte en la toma de decisiones.
Sinnaps está diseñado en dos versiones: Corporate, para grandes compañías, y Cloud, pensada para gestores de proyectos de medianas y pequeñas empresas.
Servicios destacados de Sinnaps: planificación interactiva; predicción y de riesgos; optimización de recursos; y gestión de expectativas.
Para más información: Sinnaps. Contacto:
Teresa Canive
Responsable de Comunicación
+ 34 649 070 469